Seamos sinceros, ¿cuántas personas no se han hecho pipí mientras se bañan?

Aunque no lo creas, esta práctica es bastante común y es considerado un tabú, ya que la mayoría de las personas piensan que hacerlo es simplemente asqueroso. Pero calma, la ciencia acaba de revelar que orinar en tu regadera es algo bueno de lo que no deberías avergonzarte y que al contrario de lo que crees, tiene muchos beneficios:

1. Es económico

Según estudios realizados por la Universidad de Anglia del Este en Inglaterra, al incentivar a sus casi 15 mil alumnos por año a orinar durante la ducha, pueden salvar la suficiente agua como para llenar una piscina Olímpica 26 veces. Además, significa menos desperdicio de papel, osea que se ahorra por partida doble.

2. Es más higiénico

Este punto está más enfocado a la mujeres que se limpian con papel higiénico después de orinar. Usar el papel no significa quedar limpio del todo y más si se hace de manera incorrecta de atrás hacia adelante lo que puede ocasionar que se inserten bacterias dentro de la uretra causando dolorosas infecciones. Este problema no lo tienes en la ducha porque te puedes lavar y todo cae hacia abajo y afuera de tu cuerpo.

3. Estar más preparado

¿Cuándo fue la última vez que orinaste al aire libre? No es una habilidad que muchos tengamos. Tus sesiones de orinar durante la ducha pueden ayudarte a dejar fluir tu pipí si algún día necesitas hacerlo en un bosque o algún lugar fuera de casa.

4. Es divertido

Los adultos no llegan a hacer un montón de cosas subversivas a diario, por lo que hacer pipí en la ducha puede ser su pequeño acto de rebelión del día. ¡Te sentirás más libre!

5. No es tan raro como piensas

En un Today Show hicieron una encuesta, más del 80 por ciento de las personas admitió liberar ese liquido amarillo en la ducha. ¡Admítelo, tú también lo has hecho!

¿Qué piensas?