La Paz, Baja California Sur (BCS).  La denuncia LPZ/05/HOM/2014, interpuesta por el joven Francisco Javier Arípez Bañaga, develó una posible conexión entre Ricardo Barroso Agramont, candidato a la gubernatura de Baja California Sur por el PRI-PVEM-Nueva Alianza, y miembros del antiguo grupo encargado del trasiego de drogas que mandaba en la capital.

Arípez Bañaga confesó las operaciones ilegales ante la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común Investigador Especializado en el Delito de Homicidios Dolosos de la PGJE, luego de que por varios días fue seguido por dos sujetos.

El 30 de septiembre de 2014, según consta la declaración del denunciante, intentaron secuestrarlo para, después, asesinarlo. Al percatarse de las dos personas, cuando se dirigía por la noche a la terminal de Autobuses Águila a recoger a su esposa, tuvo que salir huyendo hasta que encontró a un elemento de la Gendarmería para acusar a las personas que lo seguían.

La razón de la persecución: haber trabajado para Isabel Urías García El Chabelo, en el rancho El Platanito, presuntamente vinculado a Los Layos, desaparecida célula del crimen de La Paz que era comandada por Adelaido Soto Aguilar o Eduardo Salas Martínez ?El Güero Layo?.

A Isabel Urías García ?El Chabelo? lo vinculan con Barroso Agramont porque, primero, gestionó recursos por 100 mil pesos para que el rancho Platanitos se recuperara después del huracán Odile, a través de los programas de la delegación en el estado de Instituto Nacional de la Economía Social (INAES).

Conforme a la lista de beneficiarios, el rancho Platanitos recibió el monto el día 06 de noviembre de 2014, incluso, Isabel Urías García El Chabelo se fotografió con el entonces senador y, existen más imágenes, en donde se ve a Barroso Agramont visitando la supuesta granja. Ese día estuvo la esposa del aspirante y el delegado de INAES, Gustavo Escobar Sotelo.

Sin quererlo,  el chico de 23 años reveló como fue conociendo la forma en que se distribuía la droga (marihuana y cocaína), en diferentes áreas de la ciudad, al ganarse la confianza aunque negó ser parte del negocio ilícito, porque él creyó que sólo era una granja de pollos que surtía a diferentes locales, pero con el tiempo se fue dando cuenta que no era así.

En tres ocasiones terminó relación laboral con El Chabelo. Al no encontrar otro empleo siempre volvía hasta que conoció a una mujer que laboraba en El Platanito, y fue entonces que decidió dejar de lado su trabajo, coincidiendo con la guerra entre células del crimen organizado.

Personas cercanas al ex senador señalan una relación cercana entre El Chabelo, ex lugarteniente del Güero Layo y Ricardo Barroso Agramont. De hecho, El Chabelo se registró a la CNOP, organismo adherido al PRI.