Además de enfrentar el escarnio público por emitir un comentario sin pies ni cabeza sobre la depreciación del peso con respecto al dólar, Andrea Legarreta está frente un problema mayor: la devaluación de su credibilidad.

Por un lado, y de acuerdo con Gabriel Sosa Platas, especialista en medios de comunicación, la conductora de Hoy violó la Constitución Mexicana, que en sus más recientes reformas en materia de telecomunicaciones fijó un límite a la libertad de expresión. En el artículo 6 apartado B, fracción 4 establece que:

En su cuenta de Twitter, Legarreta se deslindó del comentario editorial y responsabilizó a los anunciantes así como a la producción del programa. Dicha “confesión” fue eliminada de su cuenta de Twitter pero no de Internet. 

En entrevista con la revista Quien del pasado 29 de enero, Legarreta cambió la versión y dijo que los productores sólo eligen quienes encabezarán las secciones por lo que pudieron ser otros de sus compañeros para la sección de “finanzas”.

Sosa Platas considera que los medios de comunicación abusan de hacer pasar comentarios, entrevistas, reportajes que no nacieron de un interés periodístico sino económico como información noticiosa sin alertar a la audiencia. “Es un engaño y un fraude a radioescuchas y televidentes, que no debe permitirse”, subraya.

Si bien no se puede corroborar el pago del comentario emitido por la conductora, es flagrante la violación a un derecho constitucional que no pasará desapercibido ante la opinión pública e incluso los televidentes del programa pues impacta directamente en la credibilidad de Legarreta.

Por otro, Marco Antonio Gómez, economista de la Universidad Panamericana, considera que la conductora dijo cosas ciertas y falsas, de una manera tan revuelta que carecen de lógica.

Por ejemplo, Legarreta responsabilizó a China de impactar en México a través del comercio, pero las exportaciones al país asiático durante 2015 correspondieron al 1.3 por ciento del total.

Además enunció que el aumento del dólar no afecta negativamente la economía familiar sin embargo, esto es mentira pues sí lo afecta aunque por el momento no lo haya hecho de manera significativa.

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