Brasil.- Polémica situación vivida en Brasil debido a que el cancerbero Bruno Fernandes de Souza, quien anteriormente jugó para el Flamengo, podría volver a la actividad profesional tras permanecer encarcelado por haber asesinado a su pareja y luego darles el cadáver a sus perros para que se alimentaran.

El club que dio la chance al arquero de regresar a las canchas fue el Boa Esporte, equipo de la Segunda División del balompié amazónico. Sin embargo, la afición se ha volcado en protestas contra la dirigencia de la escuadra, dado a que consideran este hecho como algo indigno; aunque la cúpula se ha manifestado de forma opuesta, argumentando que ellos nada tienen que ver con los actos personales cometidos por el jugador.

Este hecho le ha cobrado factura a la institución, pues sus principales patrocinadores ya les han retirado el apoyo e inclusive ya existe una petición en la página change.org iniciada por el movimiento Somos Todos Víctimas Unidas para que el guardameta no participe en la Liga Brasileña y la cual ha recabado mas de 35 mil firmas.

Bruno fue acusado en el año 2010 por los delitos de homicidio, secuestro y por esconder el cuerpo de su entonces novia, Eliza Samudio. No obstante, recientemente fue liberado a pesar de que tenía una condena de 22 años.

Con información de CNN