Estados Unidos.- El exdelantero y leyenda del Manchester United, Dwight Yorke, sufrió las consecuencias de las políticas antiinmigrantes impuestas en Estados Unidos por el Presidente Donald Trump, ya que le fue negado el acceso a dicho país.

Todo esto debido a que Yorke cometió el ‘delito’ de jugar un partido amistoso en Irán, motivo por el cual en el pasaporte del nacido en Trinidad y Tobago aparecía un sello de visita a suelo iraní.

Esto le pareció sospechoso a las autoridades norteamericanas, por lo tanto, quien fuera un gran goleador no pudo arribar a Miami, Florida como lo tenía presupuestado.

Pese a que las medidas que contemplaban prohibir la entrada a ciudadanos de siete naciones fueron echadas abajo, esto no impidió que el futbolista fuera maltratado por los controles fronterizos de Estados Unidos.