Posiblemente lo peor que puede sucederle a un estadio de futbol es que un balón no ruede nunca más sobre su cancha. Eso fue lo que le sucedió a La Martinica, aquel estadio donde el León se coronó como el primer bicampeón del futbol mexicano. 

Las gradas de este recinto pueden contar miles de anécdotas sobre el deporte, en este lugar han quedado los recuerdos y las jugadas de grandes futbolistas como Adalberto “Dumbo” López. Sin embargo, el estadio ha quedado obsoleto, en el olvido y con pocas posibilidades de revivir sus años de magia en el futbol amateur y en el profesional. Sus condiciones son deplorables, La Martinica está a punto de desplomarse...

Guión: Adriana Barrón @adribarron Colaboración de @labarra_fm con @sdpnoticias