Arjen Robben confesó al final del partido que clasificó a Holanda ante México para los cuartos de final del Mundial que simuló penal en el último minuto y que, por lo tanto, engañó al colegiado Proença. “Quiero pedir disculpas. Ha sido clavado. No debería hacer esto. Es horrible y estúpido”.
Luego el delantero holandés habló sobre el penalti que le hicieron en la primera parte y no fue señalado: “El contrario me golpeó en la espinilla y después me golpeó de nuevo. Si eso no es penalti, yo no sé de fútbol”.