El Presidente Enrique Peña Nieto se juega su futuro político e incluso su legado histórico el próximo 7 de junio en las elecciones que determinarán la composición de la cámara de diputados y otras gubernaturas estratégicas como Guerrero y Nuevo León.

El resultado definirá su proceder en la segunda parte de su sexenio y la forma de su salida. Los golpes mediáticos de Ayotzinapa, Tlatlaya, la casa blanca etc., fueron retos que se convirtieron en problemas por la falta de pericia para enfrentarlos desgastando al gobierno demostrando que el equipo de gobierno del Presidente simplemente no le ayuda, al grado de formarse una opinión que considera a EPN como el responsable directo de todos los casos mencionado bajo el lema: ¿Cuántos más? ¿Cuántos más Peña?

Aunado a la calidad de bulto de su aliado electoral PVEM el gobierno se ve en la necesidad de jugarse el todo por el todo en las elecciones para mantener el control de la cámara de diputados.

Bajo esta lógica obedece la suspensión indefinida de la evaluación de los maestros contenida en la Reforma Educativa para poder amarrar un aliado que comience a suplir al atropellado PVEM como comparsa del gobierno, el PANAL

Parte de la discusión electoral era si Morena sustituiría al PRD como tercera fuerza política pero al ir avanzando la contienda la proyección iba cambiando al considerar a Morena como cuarta fuerza política, lo cual tampoco se asegura con el golpe del viernes a la Reforma Educativa y el cierre de campaña en el DF del PRD, el primer elemento denota que el PANAL sustituirá paulatinamente al PVEM y cuenta con los agremiados necesarios para hacerlo, el otro elemento se vio con la medición de fuerzas donde el PRD con toda su base clientelar no sólo lleno el zócalo del DF sino fue un desfile de su fuerza electoral libre de caudillismos mesiánicos, mientras Morena con trabajos pudieron medio llenar la plaza del Monumento de la Revolución con fuerzas y organizaciones que no votarán el domingo en el DF.

El golpe a la Reforma Educativa es el sello de la alianza del magisterio de la SNTE con el gobierno de EPN, de lograrse no sólo daría vitalidad legislativa al gobierno actual, sino podría comenzar cobrar factura a sus adversarios disidentes de todo el país.

En primer punto EPN ya no tendría la necesidad de interlocutores, al menos en la cámara de diputados que le obligarán a negociar (sean de su partido u oposición) se tendría el control de la organización corporativa más grande América Latina por ende su ?lealtad política? para seguir operando electoralmente para el 2018 y, ambas fuerzas enfrentarán tanto en el terreno político, electoral y judicial a su enemigo común la CNTE y sus aliados narcoguerrilleros, que en este momento celebran la suspensión indefinida de la evaluación magisterial tomándola como un triunfo propio mientras la certificación magisterial o sea la reforma educativa se mantiene en todo el país.

El SNTE por medio de su partido volvió a estar cerca del gobierno la asunción de Juan Díazal liderazgo del sindicato no sólo da por terminado el reinado de Elba Esther Gordillo, sino la continuidad de sus ?conquistas sindicales? como opacidad en su gestión, cero evaluación y privilegios exorbitantes.

Además, ganó tiempo para preparar a los maestros que sí pasarán el tamiz de la evaluación y soportarán a la gran mayoría que ni siquiera están preparados con lo mínimo para ser maestros, pero no serán expulsados o capacitados, el SNTE podrá limpiar sus filas para una futura evolución por medio de las jubilaciones además de poder tener la posibilidad de armar una evaluación conveniente a sus necesidades.

La apuesta es muy alta por parte de EPN de lograr su partido o partidos la mayoría en la cámara baja y las gubernaturas será una jugada diabólica que le permitirá seguir gobernando para tener una salida más tersa que sus antecesores imponiendo a su favorito, de lo contrario el mismo 7 de julio será el final de la presente administración que deberá ir pensando cómo salir lo mejor librado de sus problemas existiendo un vacío de poder similar al calderonismo.

El otro motivo que podría hacer volar por los aires literalmente la apuesta presidencial es la anulación de elecciones en Estado clave como Oaxaca, Guerrero y Veracruz por las acciones de la CNTE y sus narcoaliados y, las acciones del CJNG que podría tomar acciones realmente violentes entorno a la jornada electoral esos factores no se pueden suspender de forma indefinida.

Y la pregunta obligada: ¿Qué sucederá con el desarrollo del país y, los niños y maestros que se verán afectados por la suspensión de la evaluación docente? Eso no importa.