Antes que nada, quiero dar una advertencia sobre que esta columna no es un debate ideológico-político, sino más bien un análisis sobre la seguridad nacional y los problemas con los que se enfrenta México en el combate contra la delincuencia organizada.

Derechos humanos y seguridad nacional

De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos, ?los derechos humanos son el conjunto de prerrogativas sustentadas en la dignidad humana, cuya realización efectiva resulta indispensable para el desarrollo integral de la persona??.

Mientras que para las Naciones Unidas, ?los derechos humanos son garantías esenciales para que podamos vivir como seres humanos. Sin ellos no podemos cultivar ni ejercer plenamente nuestras cualidades, nuestra inteligencia, talento y espiritualidad.?

Como podemos observar en ambas definiciones queda claro que existen instrumentos para garantizar la plenitud de la dignidad humana. Pero en ocasiones, estos derechos se ven encontrados contra las leyes de la seguridad nacional o seguridad interior.

La Ley de Seguridad Nacional define la seguridad nacional como ?las acciones destinadas de manera inmediata y directa a mantener la integridad, estabilidad y permanencia del Estado mexicano (?).?

Este martes, 20 de octubre, el gobierno mexicano tuvo una audiencia en la sede de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para aclarar situaciones problemáticas del país y además de acaparar protocolos para garantizar los derechos humanos en México.

En esta audiencia y en los temas de drogas y derechos humanos, y ejecuciones extrajudiciales, los representantes de cada organismo y el Estado mexicano tuvieron discrepancias por lo que se defendió la necesaria presencia de las Fuerzas Armadas en tareas policíacas, pese a múltiples denuncias de violaciones de derechos humanos.

¿Por qué es importante mantener a las Fuerzas Armadas en tareas policíacas?

España y México: La falta de equipo y policías de élite

De acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Población, somos 121 millones 5 mil 815 habitantes y cuenta con una extensión de casi 2 millones de kilómetros cuadrados; mientras que el Instituto Nacional de Estadística menciona que en España existen 46 millones 639 mil 864 habitantes y cuenta con una extensión territorial de medio millón de kilómetros cuadrados.

En principio parece una comparación extremista pero que resulta alarmante cuando se trata temas de Seguridad Nacional y amenazas a la seguridad interior. Por ejemplo, los elementos policiacos.

En México, la Comisión Nacional de Seguridad alberga a más de 41 mil elementos de élite además de 10 mil por parte de la gendarmería. Los elementos de la policía federal recién egresados llegan a ganar aproximadamente entre 12 mil y 19 mil pesos mensuales.

En España, la Guardia Civil (Benemérita) cuenta con, por si fuera poco, cerca de los 83 mil efectivos tan sólo en 2014. Los recién egresados de la academia de este tipo de policía federal española llega a ganar en un principio poco más de26 mil pesos mensuales.

Además de que nos faltaría agregar que España no tiene los mismos problemas en materia de seguridad que nuestro país. Ahora sí podemos ver la gran preocupación que llegue enfrentar el Estado mexicano en el combate a la delincuencia organizada en los tres niveles de gobierno por lo que es necesaria la participación de otros brazos armados con los que cuenta el aparato estatal.

La necesidad de la militarización: fundamentos jurídicos y legales

Ya lo dijo Felipe Calderón en el año 2010 ?que el ejército se va cuando haya policías confiables?. En su sexenio aclaró que deben existir 32 policías confiables para la ciudadanía ?es decir, una por cada estado-y sin embargo acertó en ese discurso fue el reconocimiento y aceptación de que los policías trabajan para la delincuencia organizada y no para los ciudadanos.

El anuncio del presidente Enrique peña Nieto de poner fin a las policías municipales y crear el mando único estatal, es una manera de ir escalando escaños contra la delincuencia organizada. Algunos casos como el de Nuevo León con Fuerza Civil han dado resultados positivos pero que se trata de trabajar áreas estratégicas.

Mientras tanto, el Artículo 89 y el Artículo 129 de la Constitución, estableciendo elementos necesarios para la seguridad nacional, pues hablan de que el Presidente de la República puede pedir el apoyo de las Fuerzas Armadas para combatir la delincuencia organizada y el 129 está para que los militares apoyen en tareas policiacas, siempre y cuando lo requiera o soliciten el apoyo los cuerpos policiacos de las entidades del país.

El daño de imagen de las Fuerzas Armadas es inminente, no podemos ignorarlo y decir que no pasa nada porque es verdad que lejos está de aquella imagen del soldado que ayudaba en las desgracias meteorológicas. Es por ello, que se debe acelerar el proceso del mando único para ir metiendo los batallones a sus cuarteles y realizar las funciones que realmente les competen además de contar con más elementos de policías de élite en la estrategia federal.