El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, comenzó su discurso ante la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York hablando un poco de la historia de la construcción y objetivos de las instituciones del organismo internacional, que por cierto se enorgulleció de fomentar la paz y el respeto a los derechos humanos, pues tan sólo recordó la influencia de México para los acuerdos del desarme nuclear en América Latina además de ser el mediador de los conflictos entre Estados Unidos y Cuba.

Además de señalar todas estas cuestiones rimbombantes, el señor Presidente destacó el compromiso de México con ?la ley, la paz y los derechos humanos? y ofreció la disposición del sistema de ayuda humanitaria que tiene nuestro país para los cascos azules.

Alertó y advirtió sobre nuevos populismo de izquierda y de derecha riesgosos que se aprovechan de las situaciones para dividir a sus poblaciones, pues considera que tienen falta de responsabilidad y valor ético sólo para satisfacer ambiciones personales. Claramente, es un mensaje a Donald Trump, quien se está aprovechando del degaste político de Barack Obama para generar un radicalismo en Estados Unidos.

Además pidió respeto para los migrantes, las mujeres, para todas las razas y religiones, la diversidad y la pluralidad política, y por encima el respeto a la dignidad humana; pues Trump es quien se ha atrevido a realizar actos de radicalismo en contra de los inmigrantes hispanos, se burla de ellos y los ofende culpándolos de las atrocidades y crímenes en su país. Aunque también, observamos el mensaje a Rusia y su falta de pluralidad política.

Aunque no es la primera vez que habla sobre populismo, tan sólo recordemos que en su último informe de gobierno, el presidente puso en tema de debate el populismo y la demagogia, del cual Morena se puso el saco.

Yo alertaría sobre los presidentes populistas, porque no es la primera vez que podríamos escuchar este paradigma. Para no irme muy lejos, tan sólo recordemos a Vicente Fox haciendo un llamado a que Andrés Manuel López Obrador era populista, cuando fue él quien nos prometió una educación de calidad y del primer mundo cuando en muchas escuelas no había ni electricidad; o qué tal Felipe Calderón, que advirtió del populismo en América Latina, de AMLO y, más recientemente, de Jaime Rodríguez ?El Bronco?, cuando en su sexenio copió muchas de las estructuras de los programas sociales del Distrito Federal como la ayuda de 500 míseros pesos al mes a los adultos mayores.  

Bueno, pero si hablamos de Enrique Peña Nieto todavía nos debe esa promesa de reducir a cien diputados plurinominales, que la verdad, no creo que lo logre y sería una gran lástima porque la gran reforma política y electoral ya pasó.

También podría verse claramente su postura en el conflicto en Siria, pues hizo un llamado a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU para frenar el veto, que es utilizado con fines nacionales que paran la acción internacional para castigar los criminales de guerra, los genocidios y de lesa humanidad. Además, el Presidente se unió al llamado de Francia. Esto indica, la posible intervención de la ONU en el conflicto de Siria para culminar su guerra interna, de la cual México, como siempre, estará al lado de los vecinos del norte.