Ya fue muy manoseado el tema de la señora que le salió el tiro por la culata.  Queriendo exponer a su "muchacha" terminó crucificada.

Hay que ver un problema como este desde diferentes ángulos. Ni a favor ni en contra... la comida no se niega estoy de acuerdo ... pero tampoco se roba.

Si el trabajo y el trato no satisface, pues es mejor dar las gracias y buscar otro a salir por la puerta de atrás... para mí, hay error de ambos lados.

Si naciste en pañales de seda y tuviste "nana ", pues sabes cómo es la situación y aunque le tomes cariño, pues sabes que "solo es la nana".

Y si te educaron bien,  incluso la visitas ya de viejita allá en su pueblo, donde le diste suficiente para construir una casita y le sigues pagando su "jubilación".  Me tocó ver un caso como ese.

Recuerdo cuando pequeña, en el pueblo. Muchas mujeres trabajaban en la capital como empleadas domésticas y adquirían las costumbres de "las patronas" y me refiero que al regresar al pueblo, ya no quieren prender el fogón, ya "odian " los mosquitos y demás insectos "cochinos" en la pobre casa de sus padres, ni qué decir de la comida... ¿Frijoles? ¿Nopales? ¿Huitlacoche? ¿ Quelites? ¿Qué es eso? Ellas ya son de otro nivel, ya viven en la capital y son mejores que "los indios del rancho". Díganme, ¿estoy mintiendo? ¿Quién conoce una prima de la amiga de la hermana de un amigo?

Ni qué decir de los galanes, ya nadie del pueblo o de la colonia está a la altura,  como ve al patrón o a los hijos si ya son grandes... pues se imagina protagonista de película gringa y cree que algún día "el joven" terminará enamorado de ella.

Muchas a lo que llegan es a terminar embarazadas del chofer de la casa o del jardinero.

Les digo, todo depende del ángulo desde donde estemos parados.

Hay otras "patronas" como aquí donde vivo, que contratan "chacha" por estatus,  para que crean que son pudientes, aunque traigan las tarjetas tan saturadas que pichicatean hasta la última tortilla.

Le pagan una bicoca y la hacen trabajar como burro para desquitar lo del día. Y como burro también trabaja el marido con un empleo de medio pelo, para que la señora vaya a Liverpool aunque sea a las rebaja sobre rebaja y compre bolsas extra, para cuando la inviten a una fiesta, llevar el regalo en bolsa de tienda departamental cara, aunque lo haya comprado en el tianguis.

Otras #ladychiles les va peor, les sale muy lista la mucama y la anda dejando sin marido, sin casa y sin cuentas de banco.

Hay unas más que comienzan trabajando en casa, pero se superan y es solo un pequeño capítulo de sus vidas.

He visto otras que surtían a la familia cuando los patrones andaban de viaje. Les cambiaban el shampoo caro por el de 10 pesos.  O la botella de perfume caro desaparecía, igual ropa, despensa.

Si los patrones son muy ricos ni cuenta se dan,  pero si son de clase media como la lady chiles, pues cuentan hasta las tortillas que se comen.

Por eso les decía al comienzo. Hay de todo en la viña del señor. 

A la tipa del vídeo le estalló el chirrión por el palito. Que pague las consecuencias.

Pero del lado de empleados de servicio también hay infinidad de historias. Desde chuscas hasta las que se ponen la ropa de la patrona para salir a dominguear.

Y seguirá dando mucha tinta este tema, mientras no sea reconocido como un empleo cualquiera con todas las regulaciones.  

Seguirán saliendo historias de todo tipo en todos los medios.

Buena tarde divagantes. 

Divagante @deliha25