Hoy en México, festejamos a los adultos mayores, aunque la referencia favorita sean ?los abuelos? y después de ?el día de la madre? y ?el día del padre? es quizá la fecha más importante del año porque conecta a las familias con los mayores recordando su pasado para comprender  - y en su caso, modificar- el presente.

Ríos de tinta han corrido acerca de la influencia benéfica de los abuelos en las familias, particularmente en los niños, pero la literatura se acorta cuando se trata de evidenciar lo contrario, porque los testimonios de mayores cuyas vidas se iluminaron después de la llegada de los nietos, no son tan frecuentes.

La historia que muestro a continuación, estimado lector, tiene que ver con un exorcismo, con el poder ?menospreciado- del amor incondicional y, por supuesto, con un abuelo y su nieta.

?Sus ojos se humedecieron con lágrimas espontáneas, mientras Nicole ascendía a su regazo y se acomodaba contra su pecho.

Su pelo acabado de lavar y secar, olía a limón. Palpó su mejilla suavemente, mientras ella descendía. Con ojos claros, de color azul-verdoso, ella contempló su rostro con expectación, le acercó el raído y familiar libro de cuentos y dijo: ?Léeme, abuelito, léeme?.

?Abuelito? James, ajustó cuidadosamente sus anteojos, aclaro su garganta y comenzó a leer la acostumbrada historia.

Nicole sabía las palabras de memoria y con emoción ?leía? al unísono. A cada rato, él omitía una palabra: ella, delicadamente le rectificaba. ?No abuelito, no es eso lo que dice, intentemos de nuevo para que lo hagamos bien?.

Ella no tenía idea de cómo su pureza de corazón enternecía su alma o cómo su simple confianza en él, lo conmovía.

La infancia de James había sido diferente, caracterizada por una violencia existente, recrudecida por un padre distante y exigente.

Desde sus cinco años, su padre le hacía trabajar los campos de sol a sol. Los recuerdos de su niñez, a veces se prolongan para acarrear ira y dolor.

Esta primera nieta, sin embargo, trajo gozo y luz a su vida en tal magnitud que desplazó su propia infancia. Él retribuyó su amor y fe con gentileza y dedicación, proporcionando a su mundo seguridad y protección sin medida?. Historia tomada de "5 minutos de oración en el hogar". Agosto 2014. Núm. 310

A los abuelos, la oportunidad de reconciliarse con sus padres ?y por ende, con su pasado-, llega a través de los nietos. Es hasta la llegada de los hijos de los hijos, que algunos mayores perdonan ?errores? de sus propios padres y sanan la relación que mantienen con su propia descendencia.

Por eso, siempre enfatizo que estas fechas que el comercio aprovecha para promover el consumo desmedido, sean también un tiempo de reflexión acerca del papel del amor, la amistad, la vejez, los padres, el trabajo o la historia.

Imagen tomada de internet

¿Usted qué opina, estimado lector?