?El impulso reformista histórico de México?, es el título de un interesante editorial del Financial Times. Parte de un hecho: ?Pocos líderes mundiales pueden jactarse de ser realmente reformistas radicales?,  y uno de ellos es Enrique Peña Nieto.

Después, el diario británico destaca otro hecho: Si ?los mercados financieros han alabado el impulso reformista del señor Peña Nieto, la mayoría de los mexicanos permanecen escépticos?.

Al FT le parece ?sorprendente? la diferencia ?entre el pesimismo de los mexicanos y el optimismo del mercado?.

Así que, sin lugar a dudas, como dice el citado periódico, ?el señor Peña Nieto necesita cerrar esa brecha antes de poder llamar realmente exitoso su programa de reformas?.

¿Por qué la gente no ha terminado de aceptar las reformas? El Financial Times encuentra cuatro razones:

1.- ?La primera es común en todas las reformas estructurales. Los grupos de interés que han sido dañados de manera inmediata por las reformas del señor Peña Nieto son ruidosos y están concentrados, mientras que los beneficiarios se encuentran difusos".

2.- ?Una segunda razón para la baja calificación es la estrategia consensual que ha usado para aprobar sus reformas en el Congreso. Su apartidista ?Pacto por México?, algunas veces propuesto como un modelo para la legislatura fracturada de Washington?, vino con un costo político y táctico. Mantener el pacto con vida ha implicado el resolver conflictos y el abstenerse de responder a las críticas. Esta política de silencio estudiado, sin embargo, ha llegado a su fin. Con las elecciones intermedias en el horizonte del próximo año, el señor Peña Nieto necesita asumir una posición frontal?.

3.- ?La tercera razón es la de un escepticismo entendible sobre la implementación de las reformas?.

4.- ?La última razón del pesimismo mexicano es que muchos creen que las reformas no harán diferencia alguna en sus vidas?.

La actual ofensiva mediática de Peña Nieto ?sus entrevistas en ?Hoy?, de Televisa, y la que sostuvo con siete periodistas que se va a difundir la noche de este martes? claramente pretende convencer a la opinión pública de que las reformas eran necesarias para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos.

Pero no basta con el buen trabajo de comunicación que desarrollan en Los Pinos los colaboradores de Peña Nieto. Hacen falta, además, que la gente sienta en sus bolsillos los beneficios de las reformas. Para que eso ocurra, EPN y su equipo tendrá que trabajar todavía mucho más que hasta ahora. Hay tiempo, no hay excusas. Ojalá las cosas salgan bien.