Hernán Quezada, S.J., (en Twitter @hernan_quezada), es médico de profesión y maestro en filosofía y ciencias sociales, hombre joven, comprometido, abierto a la discusión y franco. También es teólogo, sacerdote jesuita y director de vocaciones para la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús. Hoy hace el favor de conceder una breve entrevista a SDP Noticias (a través de un servidor) a propósito de los doscientos años de la restauración de la Compañía de Jesús, que se cumplen este 7 de agosto.

Los lectores pueden consultar el preámbulo a este texto en http://goo.gl/ZGmdPG, donde expongo una pequeñísima reseña de la enorme labor e influencia de los jesuitas en todo el mundo durante los últimos quinientos años.

RSV: Estimado padre, agradezco su gentileza al conceder esta breve entrevista para SDP Noticias. La primera pregunta, es obligada: ¿qué es la llamada restauración de la Compañía de Jesús?

HQ: Estimado Rodrigo, y SDP Noticias, gracias por el interés ante esta celebración que vivimos los jesuitas este año.

En 1767, los jesuitas fuimos expulsados de todos los territorios de la Nueva España. A la media noche del 25 de junio, en todas las comunidades jesuitas, los hermanos fueron detenidos y conducidos al exilio. Con este episodio se cancelaba el proyecto de evangelización de los jesuitas en México. Se borraba el sistema educativo de la Compañía en esta nación que comenzaba a gestarse y que desde el exilio detallaría Francisco Xavier Clavijero, S.J.: México.

En 1773, vendría un segundo golpe a la Compañía de Jesús: la supresión. El Papa Clemente XIV suprime, por presión del Rey Carlos III, a los jesuitas. Es un momento de dolor y confusión. Es sólo bajo el amparo de Catalina la Grande, en Rusia, donde un puñado de jesuitas se mantiene vivo ante la negativa de la reina para ejecutar la orden del Papa. El papa Pío VII a través de la Sollicitudo omnium ecclesiarum, del 7 de agosto de 1814, restauraba la Compañía de Jesús en el mundo entero. Eso celebramos este año: el bicentenario de la restauración de la orden.

RSV: En el pasado, ¿cuáles fueron los mayores retos que enfrentaron los jesuitas en su labor misionera y evangelizadora?

HQ: Los retos de todo proyecto de evangelización siempre existen y son abundantes, es imposible hacer una lista de éstos, pues en cada lugar geográfico, en cada contexto hsitórico, la Compañía de Jesús enfrenta el reto de discernir la Mayor Gloria de Dios. Y ésta es que el hombre y la mujer tengan vida en abundancia.

RSV: ¿Considera usted que México debe buena parte de su identidad actual a la presencia de la Compañía durante más de cuatrocientos años? Si es así, ¿cuáles considera que son las influencias más importantes que los jesuitas causaron en México?

HQ: Yo no soy docto en el tema, así que no puedo desarrollar o sustentar una respuesta muy profunda. Pero es conocido de todos los mexicanos el impacto de la educación de los jesuitas. El modelo educativo estaba seriamente influenciado por la Compañía de Jesús. Había una propuesta de un modelo económico, de un modelo de país y de Iglesia. Esto lo vamos a ver expresado en la obra de Clavijero, en su Historia de México. Estamos hablando ya de México. Algunos historiadores consideran este libro como el acta de nacimiento de la nación mexicana. En este sentido, humildemente creo que la identidad de México contiene una influencia de los jesuitas.

RSV: ¿Cuáles considera que son las aportaciones más valiosas que los jesuitas pueden dar al mundo en la actualidad?

HQ: Los jesuitas estamos llamados a ir donde otros no quieren o donde otros no pueden, estamos llamados al trabajo en las fronteras. No solamente en las fronteras geográficas, sino en las fronteras del pensamiento, de humanidad, estamos allamados a pensar, orar y estar en situaciones de crisis. Sin embargo, creo que lo más importante que tenemos es la espiritualidad, que es un camino que lleva a los hombres y mujeres no a seguir a San Ignacio de Loyola, sino a seguir a Jesús. Y este seguimiento brota de una identificación afectiva con Él, una identificación que nos mueve a la acción, a la construcción del Reino de Dios.

RSV: ¿Qué puede, de forma más concreta, hacer la Compañía en el México de hoy para buscar una sociedad más equitativa, justa y con oportunidades para todos?

HQ: Justamente eso nos preguntamos y oramos por ello todos los días los jesuitas: ¿cómo podemos contribuir a los grandes desafíos de nuestro país?

RSV: ¿Por qué decide usted ser jesuita y no dominico, franciscano o misionero de Guadalupe?

HQ: Al finalizar mis estudios universitarios, sin concoer a los jesuitas, viví mis primeros Ejercicios Espirituales y ahí los conocí. Su proyecto, su modo de vida, me apasionaron. Es encontrar a lo que perteneces. La Compañía de Jesús rompía mis esquemas, abría mis horizontes, mi corazón, mi mente. Sobre todo, me colocaba frente a una experiencia profunda de Dios, frente a la concreción de poder caminar al lado de Jesús, de ser su compañero. No busqué demasiado, sentí que este era mi lugar y aquí estoy.

RSV: ¿Qué significa para la propia Compañía de Jesús (máxime a dos siglos del Sollicitudo omnimum ecclesiarum de Pío VII), que Su Santidad, el Papa Francisco, sea un jesuita?

HQ: ¡Dios tiene sentido del humor! Seguro que nunca pasó por la cabeza de los jesuitas que doscientos años después de la restauración un jesuita sería el Papa.  No lo vivimos con triunfalismo, eso sería equivocado. La presencia del Papa Francisco, como a muchas y muchos, nos anima el corazón, nos mueve a la misión y nos interpela a seguir discerniendo la voluntad de Dios. Esa es nuestra misión.

RSV: ¿Cuáles son las prioridades de la Compañía de Jesús en México y el mundo para los siguientes diez años?

HQ: Como te he dicho, no tenemos proyectos fijos, pues eso implica que perdemos flexibilidad para la respuesta que la realidad nos pide. Tenemos ciertos horizontes que se basan en la misión fundamental: fe-justicia. Hoy, en México, nos importa mucho la construcción de paz, la migración y los jóvenes, entre otros muchos temas.

RSV: ¿Cómo ve el futuro no sólo de la Compañía, sino de la Iglesia católica toda para el S. XXI?

HQ: Creo, profundamente, que la Iglesia tiene mucho que aportar, creo que somos pertinentes, somos necesarios. Y veo con mucha consolación que hay vientos de esperanza.

RSV: Si alguien decide buscar contacto con la Compañía de Jesús aquí en México, ¿puede hacerlo a través de algún teléfono o correo electrónico?

HQ: Así es, el correo es: curia@sjmex.org  y la página web: www.sjmex.org

RSV: Padre Quezada, agradezco su tiempo y gentiles respuestas, esperando que sean provechosas para todos los lectores. Ojalá próximamente pueda contarse con una nueva participación suya en este medio.

HQ: Un abrazo para ti estimado Rodrigo y un saludo a los lectores de SDP Noticias.