En un video anterior, Elisa Alanís dijo lo siguiente:

1.- Que al terminar su trabajo en la Cámara de Diputados, Manlio Fabio Beltrones no desea ocupar un cargo de primer nivel en el gabinete del presidente Enrique Peña Nieto. Ni siquiera la Secretaría de Gobernación.

2.- Que Beltrones, a sus 61 años de edad, no desea terminar su carrera como subordinado de políticos mucho más jóvenes que él: EPN, de 48 años; Luis Videgaray, de 45; Miguel Ángel Osorio Chong, de 50 años, y

el jefe de la Oficina de la Presidencia, Aurelio Nuño, jovencito que no ha llegado a las cuatro décadas.

3.- Que no, que Beltrones no quiere jubilarse como subordinado de políticos con menos trayectoria y edad. No se le antoja, punto.

4.- Que si Peña se lo pide, Beltrones iría al gabinete. Pero no es lo que quiere uno de los pocos dinosaurios priistas que han escapado a la extinción.

5.- Que Beltrones lo que quieres es la presidencia nacional del PRI.

En un nuevo video, @elisaalanis afirma que Manlio Fabio Beltrones, por su buen desempeño como operador de las reformas estructurales en la Cámara, merece que se le dé casi cualquier puesto que pida.

El casi es el PRI, que Peña Nieto no parece dispuesto a entregar a un operador político tan hábil como Beltrones.

“¿Qué podría impedirle a Peña Nieto acceder a los deseos de Beltrones?”.

Responde Elisa: “Que los que Manlio Fabio pasara en el PRI no fueran sus últimos años como político activo, sino sus penúltimos”.

Es decir, afirma la columnista “que Manlio Fabio Beltrones tuviera la intención de hacer, desde el PRI, un último intento por quedarse con la candidatura presidencial priista”.

Y es que en el gabinete sus aspiraciones presidenciales, si las tuviera, estarían muy limitadas simple y sencillamente porque tendría que subordinarse, en el trabajo diario, a otros precandidatos mejor vistos por Peña Nieto.

En el PRI, claro está, con mucha más independencia Beltrones podría tejer una posibilidad real de quedarse con la candidatura para 2018.

Es lo que dice Elisa Alanís, analista que no olvida que hay un acuerdo, “pactado después del fracaso de Roberto Madrazo en las presidenciales de 2006, de que ningún presidente del PRI volverá a ser candidato a la Presidencia”.

Pero, como expresa la propia columnista, “a Beltrones le sobra habilidad para lograr un acuerdo en sentido contrario”.

Y, en efecto, eso no es algo que esté en los planes ni del presidente ni de los colaboradores de Peña Nieto.