Reflexiones sobre la libertad de expresión en México[1]

A unos cuantos días, de que tomé posesión como presidente de la República, Enrique Peña Nieto, consideré pertinente desarrollar un tema que hoy en día es de interés de la sociedad, dado que, durante la época en que se encontraba en el poder el Partido Revolucionario Institucional (PRI), en México era común escuchar de casos de censura hacia periodistas o medios de comunicación. Pero por otra parte, elegí este tema dado que en varios espacios noticiosos se ha hablado de la simpatía del presidente electo hacia ciertos medios de comunicación. Lo cual, me hace preguntarme si, México tendrá una etapa similar a la que viviera en la era priísta en materia de medios de comunicación y libertad de expresión.

Sin embargo, cuando comencé a escribir estas líneas me percaté, que la libertad de expresión no sólo fue agredida durante la etapa priísta sino que durante la gestión que está por concluir del Partido Acción Nacional, las agresiones a periodistas o medios de comunicación se siguieron dando. Pese a que durante las gestiones de Vicente Fox y Felipe Calderón se comentara que en México existía mayor libertad de expresión.

¿Esto será cierto? Haciendo un recuento de hechos, este sexenio que esta por acabar, ha sido el que más agresiones ha tenido hacia periodistas, por lo cual me hace preguntarme, ¿ha existido la libertad de expresión en México?

Desde mi punto de vista podría decir que sí, aunque ésta está limitada a diversos temas, en los cuales ciertamente existe una plena liberta de expresión, sin embargo cuando ciertas publicaciones tocan puntos sensibles sobre todo en temas económicos, políticos y judiciales, es cuando la situación cambia.

Todo lo anterior surge de una larga reflexión que tuve a raíz de ver el documental “El reportero” el cual describe las distintas agresiones que han padecido varios periodistas del semanario Zeta, medio de comunicación que cuentan con sus instalaciones en la ciudad de Tijuana-Baja California. Dicho diario desde su fundación se ha caracterizado por hablar de temas que viven a diario personas que habitan ciudades fronterizas del norte del país. En las cuales el crimen organizado tiene mayor presencia y fuerza.

En el documental se exponen el silenciamiento por medio de la agresión física en contra del reportero, la cual llega al grado de causar la muerte en algunos casos. El film, en sí mismo es una evidencia de los riesgos que viven hoy en día los profesionales de la información cuando se enfrentan a la cobertura de temas de alto riesgo.

Por otra parte, analizando varios casos de censura en contra de la prensa en México encontré que la censura no sólo se da cuando se asesina al periodista, sino que también se da de otras dos formas.

Ya descartando la primera, que es la que aludí, la segunda forma de censura en México es cuando se usa el aparato judicial en contra del periodista, para de esta forma buscar que éste dé marcha atrás en lo que escribe por presión de poder ir a la cárcel, o por el gasto económico que le representaría ir a los tribunales. Un claro ejemplo de ello sería el caso de la periodista Lydia Cacho, la cual es demandada por el empresario  Kamel Nacif por el delito de difamación, esto porque Cacho en su libro “Los demonios del Edén”, revela información sobre una red de prostitución y pornografía infantil de la cual Nacif y Jean Succar Kuri forman parte de ésta.  Como consecuencia directa, se da que Lydia Cacho es encarcelada y enjuiciada de forma acelerada por autoridades del estado de Puebla.

Este caso, atraería los reflectores de los medios cuando se dieran a conocer 12 grabaciones de Kamel Nacif con diversas personas, de las cuales una de ellas sería con el gobernador de Puebla, Mario Marín,  de dicha conversación el político hacia un claro énfasis que el no permitiría que se violentará el estado de derecho en su estado y que aplicaría toda la fuerza de la ley contra Lydia Cacho.

La tercera forma de censura de la libertad de expresión, es cuando el periodista o medio de comunicación inesperadamente son cesados de sus actividades laborales o se les retira el permiso para poder seguir laborando. Un claro ejemplo de ello sería la salida inesperada de la periodista Carmen Aristegui del noticiero Hoy por Hoy de W-Radio en 2008, algo sin duda paradójico, dado que la periodista contaba con altos niveles de audiencia. Sin embargo la respuesta que diera W-Radio sería que los criterios editoriales de la periodista no concordaban con los de la empresa, ante ese hecho decidieron no renovar su contrato, dejándola fuera del aire.

A este ejemplo hay que sumarle las acciones que emprendía  la empresa Productora e Importadora de Papel S. A.  mejor conocida como PIPSA, la cual era la que se encargaba de vender y suministrar a los distintos medios impresos de comunicación, de papel para poder imprimir sus ejemplares. Esta institución era operada por el gobierno de la república, lo cual dejaba en su poder el derecho de dar papel o no a aquellos medios que se lo merecieran, o más bien el papel se les daba a  aquellos medios que se portaran bien y hayan realizado la tarea como deseaba el gobierno.  El caso de PIPSA es un claro ejemplo de como se ejerce el poder político en contra de un medio de comunicación, para evitar el libre transito de ideas.

A manera de conclusión quisiera destacar, que hoy en día la libertad de expresión en México pende de un hilo, sobre todo en materia periodística, dado que el gobierno y la sociedad  no han garantizado las condiciones para poder ejercer la libertad de expresión en esta área. Más porque hoy en día cada vez que se asesina o silencia a un periodista, pierde la sociedad en conjunto, porque  los integrantes del gremio consideran ya no escribir sobre esos temas y con ello, se acentúa mucho más el poder de aquellos que deciden reprimir la libertad de expresión. Y atendiendo a mi exposición inicial hoy que regresa una vez más el PRI a la presidencia, tendrá un gran reto en materia de derecho y protección  a los periodistas, lo cual no será una tarea fácil. Sin embargo si las instancias gubernamentales no apoyan o defienden al gremio periodístico, esta tarea deberá asumirla la sociedad, si desea que el periodismo sigua cumpliendo su función, el derecho a informar de los asuntos de interés sociales.

www.luisangelhurtadorazo.com.mx

[1] En México, el derecho a la libertad de expresión es un atributo que ofrece la “Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos” que en  los artículos sexto y séptimo la describen de la siguiente forma: “La manifestación de ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, los derechos de tercero, provoque algún delito, o perturbe el orden público; el derecho de réplica será ejercido en los términos por la ley. (art. 6)”, por su parte el artículo 7º dice: “Es inviolable la libertad de escribir y publicar escritos sobre cualquiera materia. Ninguna ley ni autoridad puede establecer la previa censura, ni exigir fianza a los autores o impresores, ni coartar la libertad de imprenta, que no tienen más límites que el respeto a la vida privada, a la moral y a la paz pública.”